«Los beneficios de una terapia asistida por unidades caninas están comprobados, ya que el contacto con un perro mejora el ánimo, ayuda a que la presión arterial disminuya y esto permite a los pacientes estar más receptivos para aprender como para recibir un tratamiento», reveló Vanessa Pallares, fundadora y directora del Centro de Actividades y Terapias Asistidos con Caninos A.C. (CENATAC).
Ciudad de México, 24 de marzo (SinEmbargo).- Los perros son seres que han demostrado ayudar a las personas en momentos difíciles, ya sea catástrofes naturales o en terapias como es el caso de la iniciativa «Juntos es Mejor» de Purina y el Centro de Actividades Asistidas por Caninos A.C. (CENATAC) que anunció mayor alcance en su labor de apoyo a niños en situación de vulnerabilidad, personas con discapacidad y adultos mayores con Alzheimer.
«Juntos es Mejor» colaborará con nuevas asociaciones, como el Centro de Rehabilitación “Gaby Brimmer” y el Hospital Pediátrico San Juan de Aragón DIF. «Estamos entusiasmados de ampliar nuestro impacto en la comunidad en colaboración con instituciones que cuentan el expertise de atención a personas en situación de vulnerabilidad», dijo Paola Mendoza, Directora de Marketing en Nestlé Purina México.
Durante la conferencia de prensa se anunció el Proyecto Guau para colaboradores de Nestlé México y Nestlé Purina, este consiste en que personas que forman parte del equipo de Purina y Nestlé educarán y socializarán a cachorros durante 12 meses, después serán entregados al equipo que los prepara para brindar terapia. Los primeros cachorros de este programa en México son Rufo y Tessa.
PERROS DE TERAPIA
Los perros ayudan en procesos complementarios, es decir, ayudan en terapias, actividades o situaciones educativas, en educación regular o en educación especial en las que el perro se convierte en un facilitador.
Vanessa Payares, directora del Centro de Actividades y Terapias Asistidas con Caninos (CENATAC), compartió que todos los perros pueden ser perros de terapia, lo más importante es su temperamento, se busca que tengan temperamento medio, es decir, que le guste convivir con los demás y tengan buena socialización. Algunos perritos de este programa fueron donados y otros rescatados de la calle. Además, es clave que el perro disfrute de realizar las terapias, siempre se ve por su bienestar y que se encuentre sano y feliz. «En el momento en que un perro no disfrute su trabajo es jubilado, no importa que tenga 6 meses», destacó Vanessa.
Payares contó que cuentan con un equipo de 16 perros, cada uno tiene un horario laboral de 4 horas pero con descansos, sus sesiones van de los 5 a los 35 minutos máximo, se dan descansos por eso van varios perritos para las terapias porque se van alternando. ¿En dónde dan terapias? Los perritos y sus técnicos trabajan en los hospitales: Hospital Niño DIF Pachuca, Pediátrico de Coyoacán y hospital San Juan de Aragón.
Vanessa contó que el proceso para entrar a los hospitales fue complicado, sin embargo, los perros llevan un control veterinario de acuerdo a las normas mexicanas, protocolos de limpieza para entrar a las instituciones y controles continuos epidemiológicos para asegurar la convivencia con las personas.